La noche del 29 al 30 de octubre volvemos de nuevo al horario de invierno. ¡A las 3.00 serán las 2.00! Una hora más para dormir, pero, todos los años surge la misma pregunta: ¿es realmente necesario el cambio de hora?
Lo cierto es que durante los días posteriores nos sentimos diferentes, más cansados y nos cuesta adaptarnos al nuevo horario.
Si eres de los que tarda varios días en habituarse, en Grupo Lirón te contamos cómo afecta el cambio de hora al sueño. ¡No te pierdas este post!
¿Por qué se cambia la hora en octubre?
Ambos cambios de horario, tanto el de primavera como el de invierno, tienen que ver con ajustar la jornada laboral con las horas de luz diarias, de manera que se aproveche más la luz natural y así favorecer la eficiencia energética.
Sin embargo, el cambio de horario está en constante controversia, debido a los efectos negativos que sufre el cuerpo los primeros días en el proceso de adaptación.
Nos sentimos más fatigados
Cuando llega la hora de dormir, nuestro cuerpo siente que todavía no es el momento. ¡Y es que nuestro sueño se rige con la hora antigua!
Exceso de apetito
Al atrasarse una hora, es normal que nos entre hambre mucho antes de lo esperado. ¡No te preocupes! En unos días tu horario para comer volverá a regularizarse.
Tenemos más sueño
Siempre se dice que la noche del cambio horario tiene una hora más para dormir, pero la realidad es que la mayoría de las personas suelen despertarse antes de lo normal. Aunque a quién madruga Dios le ayuda, ¿no?
Consejos para llevar mejor el cambio horario
No te eches la siesta
Durante los primeros días, intenta no dormir siesta. Así a la hora de acostarte te sentirás más cansado y podrás conciliar más fácilmente el sueño.
Vete a la cama según el nuevo horario
Para pillar el ritmo del nuevo horario puedes adelantar tu hora de dormir. Por ejemplo, si antes te acostabas a las diez ahora puedes hacerlo a las nueve. ¡Créenos, tu cuerpo te agradecerá que respetes sus necesidades!
Y tú, ¿estás a favor del cambio de horario? ¿Notas su efecto en tu descanso?