Elegir un buen colchón es una tarea tan importante como complicada. La cantidad de modelos disponibles en el mercado es enorme y a veces es fácil tener dudas sobre cuáles son las diferencias entre ellos. Para hacértelo más fácil, hoy te explicamos qué tipos de colchones existen y cuáles son las ventajas de cada uno… ¡Comencemos!
La clasificación los colchones
A rasgos generales, podemos hacer una clasificación de los diferentes tipos de colchón según el material de su núcleo. El núcleo, como bien indica la palabra, es la parte central y más importante del colchón, la cual se encarga de proporcionar el soporte necesario para un buen descanso. Dependiendo del material que se utilice en el núcleo, podemos considerar los siguientes tipos de colchones.
Colchones de muelles
Los colchones de muelles tienen una estructura especialmente firme, lo que permite una gran libertad de movimientos y una distribución del peso muy unificada, algo especialmente ideal cuando se comparte cama. Lo más característico de este tipo de colchones es la transpirabilidad que ofrecen, ya que el sistema de muelles permite que el aire pase fácilmente a través de ellos proporcionando una sensación más fresca. Existen varios tipos de colchones de muelles, pero los más innovadores son los de muelle ensacado y los de muelle encapsulado, una evolución de los de muelle tradicional. Ambos tipos cuentan con una línea propia en Lirón.
Colchones de espuma HR
Lejos quedaron los tiempos en los que los colchones de espuma eran sinónimo de productos baratos y de calidad cuestionable: los nuevos núcleos de espuma HR (High Resilience o Alta Resiliencia) son de mucha mejor calidad y más resistentes al paso del tiempo.
Estos colchones HR son especialmente flexibles, lo que proporciona una adaptabilidad máxima y una sensación más acogedora cuando se descansa sobre ellos. La mayoría de estos modelos suelen tener una firmeza media y su transpirabilidad ha evolucionado enormemente, aunque se siguen considerando un poco más cálidos que los de muelles. Nuestras líneas Núcleo Flexible y Núcleo Enrollado cuentan con muchos modelos con este tipo de núcleo.
Colchones de látex
El material del núcleo de los colchones de látex puede ser de origen natural, procedente del árbol de caucho, o sintético, o una mezcla de ambos. Los núcleos de látex se caracterizan por su suavidad y elasticidad, proporcionando una gran adaptabilidad al cuerpo y una reducción notable de los puntos de presión. Además, estos colchones son perfectos para camas articuladas. En Lirón contamos con un modelo de estas características, el Látex.
Extra: colchones de viscoelástica
No se pueden considerar per se como parte de esta clasificación, ya que no se pueden crear núcleos compuesto por viscoelástica en su totalidad, ya que no serían lo suficientemente firmes. Sin embargo, este material es fundamental y se incorpora como una capa adicional para hacer más confortables todo tipo de colchones: de muelles, de espuma… Nuestros modelos Termofresh, Olive o Neutra, por poner unos ejemplos, poseen capas de este material.
La viscoelástica es un material que fue desarrollado por la NASA para minimizar la presión que sufrían los astronautas en los despegues y aterrizajes, y su propiedad más característica es su capacidad de adaptarse al cuerpo y volver a su forma original. En la actualidad pueden encontrarse otros materiales que derivan de ella, como el viscogel, el viscocarbono o el viscografeno.
¡Esperamos que esta completa guía te haya servido para conocer un poco mejor los tipos de colchones que puedes encontrar en el mercado! Si quieres conocer más sobre nuestras líneas o los materiales de nuestros productos, no dudes en contactar con nosotros.